Voladura

Nombre: Ethaw
Ubicación: A Coruña

lunes, mayo 29, 2006

Ideas de infinito

Se posan los días inmaculados y contentos de ser un espacio ocupado por aquellos que quieren ocupar una plaza en el espacio. El infinito fue. Fueron largas discusiones sobre el porvenir de la mente, el pensamiento posado con retahílas en el cuaderno de un loco.
El universo se concentra en un punto donde osamos debatir sobre algún posible futuro de la especie. El universo siempre fue una invención del humano, del ser que inventa cosas, el miedo inventado para aparcar su ignorancia. Fue que fue el espacio un recoveco de la locura. Fue que fue que te vi y pensé que el amor era verdad como cuando se muere la gente para nunca más volver.
Pero el espacio mengua. Te vas detrás de las sábanas compartidas y metidas luego en la lavadora, y todo ese amor es tanto como la gente que desea quedarse aquí para siempre. El amor es el espacio y tu huída el universo. Cuando tu no estás el infinito se torna posible porque en el vacío de las cosas tendemos a imaginar. Si fuera capaz de borrarte nunca escribiría nada. Pero soy como tu me das, tan llego de lagunas como el finito abrazo de tus disculpas como cuando te creo en mis fabulaciones y, como un demiurgo, origino ideas que el tiempo borra, ideas del asfalto quemado en mi cuaderno.

martes, mayo 23, 2006

Historia común

Las historias se han originado en este vasto mundo con la idea de dar cabida a la imaginación en nuestras memorias. Las historias del caballero enamorado buscado su amada y dejando en su camino ley y sombra junto a cadáveres y frío; la historia de un diario que transfiguras con la sola idea de vagar por el universo; historias de soslayo, caricias en la piel cuando mudas de carita ya que llueve en tu corazón, corazones que inventan historias, historias prohibidas cuando nadie más que tu sabe de su existencia, o como mucho, aquél que contigo surca la marea absurda de esta cotidianidad.
Mi historia ni difiere mucho de nada ni tampoco transcurre por caminos muy distintos a los tuyos. Si bien todo sendero tiene su paralelismo la finalidad estriba en el punto y final. Durante ese trayecto intentaré bailar al son de mis letras que alumbran lo poquito que soy, diferente en la soledad de mi espejo, mártir sin adoración de aquellos caballeros y mesas redondas. Durante ese andar menudo junto a mis ojos expectantes, describiré tantas ganas de cambiar el espacio que compartimos aún fuera con batallas de algodones y labios pronunciando lo que te antecede.
Mi historia no difiere de nada. Trémula carne impávida, contigo que escribes a saber por qué, contigo que harás de mi historia posible hasta que llegue esa llanura infinita de puntos suspensivos... Será que contigo mi historia empieza a escribirse sin tendencia a aniquilar lo andado, contigo establecido en aquel punto de fuga permanente; y si no lograra acabar lo que algún día empecé, sé que en algún lugar de este infame planeta algebraico el testigo será recogido y continuará la historia, tu historia, mi historia, nuestra historia.

viernes, mayo 05, 2006

Cinco deditos



Fue dejándome sus huellas por toda la casa. Tengo una casita de arena, arena blanca, dunas junto a mi cama de fuerte oleaje cuando duermo. Será que cuando logro dormir sueño y soñando ella va dejándome huellas por toda la casa, en silencio, en estas noches veraniegas habitadas de amores por defecto y alguna omisión. Por la silueta de las huellas en mi suelo sospecho que debe de ser liviana como el aire, así como de poco peso, esquiva, silente. Por su número descomunal de huellas doy por sentado que debe de ser algo curiosa. Huellas por toda la casa. Curiosa como yo por saber quién es, curiosa como todos, creo.

Intentaré esta noche quedarme despierto junto a mi cama de oleajes, bueno, de ligera marea si logro mantenerme en vela, de pie al ladito del pasillo central hecha de conchas y espejos que lo repiten todo. Intentaré quedarme despierto. Lo intentaré. Hace como tres semanas que me repito lo mismo. Pienso que quiero que esos pies vengan y descubran mi casa con todos sus secretos y, así, como soñando despierto, me duermo de nuevo e invito que esos pies entren y recorran todo mis recovecos; curiosa por saber quién soy, curiosa como tu, creo.